Los Productos

A pesar de que los vinos Lambrusco que se producen son muy diferentes el uno del otro, todos son verdaderamente especiales. Vinos de aguja con tres coloraciones distintas: la pureza del blanco la elegancia del rosado, y la pasión del tinto. Un lambrusco para cada gusto, un lambrusco para cada ocasión.

Lambrusco de Emilia tinto IGT

Este vino posee un color rojo rubí profundo, con reflejos violáceos y una espuma ligera con bordes del mismo color. Su sabor intenso goza de un cuerpo exquisito. Es un vino equilibrado en cuanto a su acidez y es ligeramente frutal con un dejo agradable y ligeramente amargo. El Lambrusco Cella es un vino que se bebe fácilmente y es ideal para ser degustado diariamente. Este vino es ideal como aperitivo y se degusta con los postres y la repostería típica de Emilia Romana.

Lambrusco de Emilia Blanco IGT

El Lambrusco cella Blanco nace de una mezcla de uvas cuidadosamente seleccionadas que le brindan un color luminiscente. Es un vino seco pero delicadamente frutal. El Cella Blanco se adapta al gusto de los consumidores americanos. Es de color amarillo pajizo claro con reflejos verdosos, de buque delicado, fresco y frutal. Su gusto es equilibrado y ligeramente dulce con sabores agradablemente frutales y con un retrogusto límpido.

Lambrusco de Emilia Rosado IGT

El Cella Lambrusco de Emilia Rosado se produce de uvas de Lambrusco cultivadas en la zona circundante a Sorbara y S. Croce en la provincia de Módena, zona norte de Italia. Este vino se caracteriza por una espuma rosada que da un color rosado claro. Posee un buque fresco, delicado, frutal y con una fragancia particular de violeta. Su sabor es fresco, brioso, agradablemente suave, armonioso y fragante.

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